Manuel Jesús Orbegozo (MJO) ha sido el periodista peruano que más ha viajado por el mundo en misión informativa testimonial. Se calcula que ha dado nueve vueltas el globo terráqueo reporteando a grandes líderes mundiales y cubriendo información de conflictos bélicos.
En enero del 2008 llegó a Trujillo, de paso a Otuzco, su tierra natal, para orar ante la Virgen de la Puerta, de la cual era devoto y fiel creyente. No pudo regresar a Lima sin antes juramentar al primer directorio de la asociación cultural que lleva su nombre.
El acto fue en uno de los coloniales ambientes del Club Central. Ahí estuvo el presidente Sigifredo Orbegoso Venegas, reconocido académico y constitucionalista, como también Aurea Rodríguez Ulloa, Diego Chico Barrantes y el autor del artículo.
MJO no ocultó su emoción y con la sencillez que le caracterizó dijo que formar una asociación con su nombre no era para tanto. “¿Pero qué cosa he hecho para que ustedes pongan mi nombre a esta asociación?”, preguntó. Sin embargo no tuvo más remedio que asentir y proceder a juramentar al primer directorio.
Lo que vino después fue producto de su fina sensibilidad y desprendimiento. Reveló aquella tarde que sus viajes por el mundo le permitieron recoger numerosas prendas testimoniales e innumerables objetos de gran valor intrínseco, como piedras del muro de Berlín, bombas gastadas de la guerra de Vietnam, el rosario de la madre Teresa de Calcuta, así como documentos y libros de gran valor cultural.
Dejó entrever su intención de donar todo ese “tesoro” a la ciudad Otuzco, lugar donde nació, o al balneario de Buenos Aires, donde vivió algunos años antes de partir a Lima en busca de prósperos horizontes. Sin embargo, en una muestra más de su sencillez, dejó que la flamante asociación cultural decidiera el destino de sus singulares enseres.
La idea no pudo ser más acertada. El valioso legado debía estar en Trujillo, que merecidamente ostenta el título de Capital de la Cultura. “Ni vuelta que darle”, expresó emocionado MJO. “Todo lo que tengo lo dejaré de herencia a Trujillo, a los jóvenes y a quienes quieran nutrirse de más conocimientos”, añadió, sin ocultar su nostalgia. Su gesto fue, sin darnos cuenta, un presagio de su partida a la eternidad, a donde sólo van los hombres buenos y grandes de espíritu.
Un mes después, el 29 de febrero del 2008, MJO dirige una carta al alcalde de Trujillo, César Acuña Peralta, a quien le expresa su deseo de donar libros de reconocidos escritores, prendas testimoniales de su labor reporteril y objetos de mucho valor intangible.
La carta dice: “Mi intención, señor Alcalde, es donar todo este bagaje de piezas y materiales a la Municipalidad de Trujillo, representante de la ciudad, para que los disponga en un pequeño Museo de sitio o el nombre que sus especialistas consideren conveniente”.
En otro párrafo señala: “Deseo informarle a Ud., señor Alcalde, que en la ciudad funciona la Asociación Cultural «Manuel Jesús Orbegozo», que la preside el doctor Sigifredo Orbegoso Venegas, Asociación que me representará ante cualquier circunstancia”.
Finalmente expresa: “De esta manera deseo contribuir con esta Municipalidad para incrementar y asegurar el bagaje cultural y las promociones necesarias para elevar los niveles de la bien llamada Trujillo: Capital de la Cultura».
Manuel Jesús Orbegozo Hernández fue periodista profesional con larga trayectoria nacional e internacional, se jubiló de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, donde trabajó en la Escuela de Ciencias de la Comunicación 38 años continuos. Además trabajó en los diarios La Crónica, Expreso, El Peruano, en especial en El Comercio durante 32 años.
Desde aquel entonces, siempre que venía a Trujillo, mostraba mucho interés en saber donde iba a ser cobijado su legado cultural. La última fue el 29 de abril del año pasado. Lo acompañé al teatro Municipal, en donde inicialmente en el segundo piso se pensó instalar la biblioteca.
En el teatro Municipal a invitación del poeta Manuel Medina, director del Programa Poesía Joven, improvisó una amena y confesional charla con los jóvenes aspirantes a poetas. La invitación era para un ligero saludo, pero su sencillez y vocación de maestro hizo que el saludo se convirtiera no en una charla sino en una conferencia magistral.
MJO no solo habló de periodismo, al señalar que el periodista debe usar como arma la verdad para tener credibilidad y reconocimiento. “Nunca usé el periodismo para insultar a nadie. El periodismo no es para eso, es para educar, para culturizar, para orientar hacia el bien común”, expresó.
Gracias a la valiosa donación hecha en vida por Manuel Jesús Orbegozo, la Municipalidad Provincial de Trujillo inauguró hace poco la biblioteca que lleva su nombre, ubicada en la Casa de la Juventud, que sirve de fuente de conocimiento y para la investigación a estudiantes, profesionales y público en general, que día a día visitan este centro cultural municipal.
Manuel Rodríguez Romero
