Ante el frío, es necesario buscar diferentes opciones para conseguir aumentar la temperatura corporal sin incurrir en un consumo excesivo de calorías que a la larga pueden ocasionar sobrepeso y obesidad. Los nutricionistas del Ministerio de Salud (Minsa), indican que la forma más rápida de combatir el frío es a través de la alimentación y la actividad física.
Un ejemplo son las sopas, que nos ayudará a aumentar la temperatura corporal. Lo recomendable es prepárala en casa con los ingredientes adecuados.
Otra opción saludable para mantener nuestro cuerpo caliente son las infusiones. Existe una gran variedad de hierbas que nos resultan muy agradables al paladar, y que aportan gran cantidad de nutrientes y antioxidantes que hacen que el cuerpo se mantenga en perfectas condiciones.
La actividad física es otra forma de conseguir una mayor actividad interna y lograr aumentar la temperatura media del organismo. Si no hay actividad, los órganos y la circulación se mantienen en reposo, lo que hace que la sangre fluya mucho más lenta, y por lo tanto la temperatura sea menor.
Los ejercicios aumentarán el ritmo cardiaco con el consiguiente aumento de la circulación y de la temperatura corporal, mitigando el frío. Ni que decir de una buena aclimatación mediante la vestimenta ya que es fundamental para no padecer en nuestra piel los rigores de las bajas temperaturas.