El viernes La Libertad solo tuvo 3 fallecidos por COVID-19 y en la semana que terminó el promedio diario fue de 5 muertes, considerando que hubo 30 en total. Por otra parte, desde el jueves último no hay un solo paciente que necesite oxígeno en el hospital de Laredo, y en Salaverry hay dos pacientes que serán dados de alta pronto.
El gobernador regional Manuel Llempén dio a conocer esto durante una campaña médica comunitaria realizada en la I.E. José Carlos Mariátegui, de El Porvenir, donde estuvo acompañado por el alcalde Víctor Rebaza y el gerente regional de Salud, Fernando Padilla.
“Hay buenas noticias, pero no podemos bajar la guardia. Con el levantamiento de la cuarentena hay el riesgo de una segunda ola de contagios. Evitar eso depende de todos. La población también tiene que poner su parte en la prevención”, manifestó
De los tres fallecidos dos ocurrieron en el hospital Regional y son personas de La Esperanza y Laredo en tanto que el otro deceso ocurrió en una vivienda, en Florencia de Mora. Debe recordarse que, entre junio y julio, en los días con los picos más altos, la cifra era en promedio superior a los 80 diarios.
En Laredo hubo más de 150 pacientes durante la pandemia. Allí hay aún casos de Covid-19 y asintomáticos con problemas leves que no necesitan ser hospitalizados.
Llempén recordó que ahora hay camas libres de hospitalización. “Eso es importante porque si hubiera una segunda ola de contagios tendríamos disponibilidad para atender”, expresó.
Invocó seguidamente a quienes tengan síntomas de covid-19 acercarse a los establecimientos de salud, los que ahora están operando al 100%, y si hubiera algún caso de inmediato será derivado al hospital Regional.
Pidió a la población en general con necesidad inevitable de salir, que evite lugares donde haya aglomeración. “Nos contagiamos donde hay mucha gente. Si ustedes van a una reunión con cinco personas la probabilidad de contagio en los primeros minutos es baja, pero si pasa el tiempo el riesgo se incrementa sin que lleguen más personas”, acotó.
Por ello recomendó que traten de estar juntos el menor tiempo posible y en ambientes ventilados, para evitar la concentración del coronavirus. Ayúdennos, no bajemos la guardia. Sigamos con el uso permanente de la mascarilla, el lavado de manos y el distanciamiento físico, compartiendo el menor tiempo posible con otras personas, agregó.
El 80% de pacientes fallecidos por covid-19 tuvo comorbilidad, principalmente, obesidad diabetes e hipertensión. “No tener una dieta adecuada puede llevarnos a la obesidad”, recalcó. De cada 100 fallecidos 80 a 85 eran obesos, diabético o hipertensos. Se cree que los gorditos están bien nutridos, pero son los que menos resistencia le pueden hacer al coronavirus
Indicó al respecto que convocó a las universidades para hacer un trabajo conjunto en alimentación saludable. “Desde el año pasado, antes de la pandemia, en ningún colegio los quioscos escolares pueden vender gaseosas, jugos enlatados o alimentos chatarra. Si tenemos exceso en azúcar podríamos llegar a una enfermedad crónica como la diabetes. Si nuestra alimentación tiene exceso de sal posiblemente entremos a una hipertensión”, agregó.
SEGUNDA OLA
El gobernador señaló su preocupación debido a que a partir del primero de octubre quedará sin efecto la inamovilidad de los domingos y que quizá muchas personas vuelvan a salir, lo que podría generar una segunda ola de infectados. “Dios quiera que no suceda así. Eso depende del cuidado de todos”, enfatizó.
Felizmente el sistema de salud pública ganó experiencia en atención Covid, lo que va a permitir atender esto con mejores herramientas, y el 60% de camas hospitalarias están disponibles para ser utilizadas, los laboratorios nos están proveyendo medicamentos y nos estamos abasteciendo, añadió.
CAMAS UCI
Recordó que en todo el sistema de salud de la región hay 83 camas UCI. En el hospital Regional hay cinco y si se incrementan los casos se buscará cortar la cadena de contagio en el primer momento.
“Por eso estamos saliendo a diversas partes de la región para identificar a los positivos con pruebas rápidas para dar medicamento y aislar. Estuvimos recientemente en Huamachuco, en Casa Grande y en Pacasmayo”, dijo.
En El Porvenir indicó que el alcalde Víctor Rebaza está realizando unas 50 actividades similares para atender a la población con consultas médicas, midiendo la saturación de oxígeno en la sangre, entrega alimentos, vacuna contra influenza y neumococo, descarte VIH y los servicios de Demuna y Omaped.
Más de 1000 personas fueron beneficiadas con la campaña de salud organizada por el Gobierno Regional y la Municipalidad de El Porvenir en la I.E. José Carlos Mariátegui.
Llempén también pidió a la población, especialmente a las personas mayores de 50 años, a hidratarse y tomar agua de tiempo de matico y eucalipto. Si no estamos hidratados estamos con bajas defensas, hay que elevar las defensas.
Invocó luego a no descuidar las vacunas de los niños y a combatir las secuelas de la pandemia, como la perdida de algún familiar, del trabajo o el encierro en las casas, recibiendo charlas en los centros asistenciales.
“Eso puede alterar nuestra emociones y comportamiento. No es bueno que dejemos que estas emociones avancen y nos sigan minando, hablemos sobre ello con nuestros familiares o amigos, para desahogarnos”, recomendó.