La hermosa Plaza Mayor de Trujillo es la mejor enseñanza de la historia de nuestros antepasados.
En sus inicios la plaza aparecía plana y sin monumentos que la adornen, hasta que en 1841 Sanz de Zárate donó una pileta hecha en piedra blanca, obraje de Santa Cruz de Carabamba, en 1867 la pileta fue iluminada con ocho pescantes con sus respectivos faroles y se instaló una verja de fierro para protegerla.
En la parte central de la plaza actualmente se ubica el Monumento de La Libertad, esculpido por el alemán Edmundo Moeller y luego armado por Enrique Albretch.
Inaugurado el 4 de julio de 1929.
El monumento tiene tres niveles:
PRIMERO: Se encuentran las alegorías, cuatro grupos de esculturas que representan:
- La Abundancia: Simbolizada por la mujer que sostiene en una mano un collar y en la otra un racimo de uvas.
- La Ciencia: Representada por el anciano con un joven que sostiene un libro abierto.
- El Comercio: Cuyo símbolo es el hombre con una rueda dentada debajo de las piernas.
- La Salud: Expresada por el hombre que lleva una gavilla de trigo, el cordero y el niño desnudo.
SEGUNDO: Está representado el drama de la libertad, tres estatuas que representan los tres momentos de la lucha del pueblo por la independencia:
- La Opresión: Es el hombre que tiene las manos sobre el cuello.
- La Lucha: Representada por el hombre que intenta romper las cadenas.
- La Liberación: El hombre con los brazos levantados haciendo puño.
Además de tres placas conmemorativas de bronce.
- Proclamación de la Independencia de Trujillo (29 de diciembre de 1820)
- Batalla de Junín (6 de agosto de 1824)
- Batalla de Ayacucho (9 de diciembre de 1824)
TERCERO:
La Juventud, representada por el hombre que está parado sobre el globo terráqueo y en sus manos lleva la antorcha de la Libertad.
Aparte de conocer su historia, podemos ir a distraernos, observando los distintos números artísticos, tomarnos fotos para el recuerdo y en época de navidad se ilumina con diferentes decoraciones alusivas a la fecha. A sus inmediaciones se encuentran construcciones del Palacio de Gobierno de Trujillo, la Basílica menor, el Arzobispado de Trujillo y agradables casonas virreinales y republicanas; convirtiendo a nuestra Plaza Mayor en la segunda más importante del Perú.
