Actualmente, las enfermedades crónicas no transmisibles, se constituyen en una de las principales causas de muerte y discapacidad en países desarrollados o losn que están en vías de serlo como el caso de Perú.
Entre estas enfermedades, están las cardiovasculares, la diabetes mellitus, las enfermedades respiratorias crónicas, el cáncer, etc., las cuales están directamente relacionadas al estilo de vida, siendo el sedentarismo y/o falta de actividad física en conjunto con el tabaquismo y la dieta desequilibrada, los principales factores de riesgo responsables de su desarrollo y de casi el 60% de los fallecimientos y del 46% de las enfermedades en el mundo.
La práctica de ejercicio físico diario es un factor fundamental para prevenir múltiples enfermedades. El cuerpo humano fue creado para realizar ejercicio y con la falta de ello, se renuncia a la oportunidad de mejorar y/o conservar la salud. En general, la actividad física involucra cualquier movimiento corporal que implica gasto energético.
El ejercicio físico debe ser estructurado con la finalidad de mejorar la condición del cuerpo y obtener muchas ventajas como mejorar la capacidad cardiaca y pulmonar, incrementar el tamaño, fuerza y dureza muscular, mejorar los reflejos y la coordinación, quemar el exceso de grasa, ayudar a proteger los huesos, disminuir la depresión y lo más importante, aumentar la calidad de vida de las personas; esto se hace mucho más evidente, en el caso de las enfermedades crónicas antes mencionadas.