Michael Clarke Duncan, fallecido el último lunes en el Centro Médico Cedars-Sinaí, en Los Ángeles, donde recibía atención médica tras sufrir un infarto cardíaco sufrido en julio del mismo año, trabajó como stripper en un nightclub antes de alcanzar el estrellato.
Para ayudar a mantener a su familia se dedicó a excavar zanjas para una compañía de gas y fue encargado de la seguridad en diferentes clubes de Chicago.
Luego, viajó a Los Ángeles en donde su físico (casi dos metros de alto y 145 kg de peso) le ayudó a conseguir un trabajo como stripper y se presentaba con el seudónimo de Black Cesar, informa el diario The New York Times.
Su madre, que había soñado con ser actriz, le instó a probar suerte en la actuación, y se empezó a trabajar como guardaespaldas de estrellas como Will Smith, Martin Lawrence y Jamie Foxx. Eso lo llevó a conseguir una sucesión de papeles menores en películas, muchos como miembro de seguridad.
Fue en «Armageddon», donde junto a Bruce Willis, conquistó la taquilla y dio el anhelado salto a la fama.
Fuente: Rpp