De la necesidad de contribuir a resolver el problema de la anemia y la desnutrición que afecta, sobre todo a la niñez, pero también a los adultos, como ocurrió con su esposa, el ingeniero agroindustrial ayacuchano Aníbal Prado Condori creó una fórmula para producir fideos a base de quinua y cuy, dos superalimentos oriundos del Perú, que combaten ambos problemas de salud y favorecen la alimentación saludable.
Nacido hace 33 años en la provincia de Huamanga, padre de dos hijos, y formado en la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga (UNSCH), Aníbal Prado manifestó, en diálogo con los medios, que concibió la idea de generar los fideos nutritivos antianemia durante un almuerzo familiar, en octubre de 2019.
“En esa circunstancia, a mi esposa, quien tenía casi ocho meses de embarazo, le detectaron anemia al registrar 10 gramos de hemoglobina. El médico le recomendó consumir alimentos ricos en hierro, sobre todo de origen animal. Una buena alternativa es consumir cuy, que es un alimento tradicional y de fácil acceso en Ayacucho, pero a mi esposa no le gusta. Entonces, pensé en cómo incluir este excelente insumo rico en hierro y proteínas en un alimento como los fideos que son también muy consumidos por la población ayacuchana, pero también en todo el Perú”, comentó Aníbal.
En efecto, según la Organización Internacional de la Pasta, el Perú se ubica entre los 10 países del mundo con mayor consumo de fideos por persona, con alrededor de ocho kilos por año.
Ejecución de la idea
Dos fueron las circunstancias que gatillaron la ejecución de esta idea, pensada en principio para combatir la anemia de su esposa, pero también de la niñez ayacuchana que registró una prevalencia de 45 % , y una tasa de desnutrición crónica de 17.3%, según la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (ENDES) de 2019.
La primera fue la elección del tema para su tesis de bachiller como ingeniero agroindustrial, y la segunda su participación en la Feria de Jóvenes Emprendedores Ayacuchanos, a raíz de la recomendación de sus profesores asesores de la tesis, quienes vieron en la idea de Aníbal Prado un valioso aporte a la lucha contra la anemia y la desnutrición. “No sabes lo que tienes en tus manos”, le dijeron al conocer su propuesta.
Nace “Nutripasta”
Con la confianza de haber obtenido un producto alimenticio de gran valor nutricional y de agradable sabor, Aníbal se concentró el diseño de la marca y la presentación comercial de su flamante creación para poder presentarse en la Feria de Jóvenes Emprendedores Ayacuchanos, realizada en diciembre de 2019.
Con la ayuda de amigos, Prado Condori bautizó a sus fideos con el nombre de “Nutripasta”, cuyo logotipo lleva la imagen de un simpático cuy y unas ramas de quinua, que rápidamente llamaron la atención de los asistentes a la feria de jóvenes emprendedores.
Tras explicar las bondades alimenticias y ofrecer una degustación al público de su “Nutripasta”, el joven ingeniero agroindustrial comprobó que la opinión de esposa era acertada y que el público también recibía con agrado su creación.
Apoyo clave para el éxito
Aníbal Prado confesó que el creciente éxito que viene cosechando en poco más de seis meses desde que presentó en sociedad su “Nutripasta”, se debe al haberse cruzado en su camino personas que creyeron en su idea y su historia de vida.
En efecto, del inicial entusiasmo se pasó a la incertidumbre de cómo continuar con el proyecto para dar el paso a la producción masiva del producto y su comercialización, teniendo en cuenta que Aníbal no contaba con los recursos económicos para emprender esa tarea.
Sin embargo, el conocer a personas como Carlos Añaños, presidente del Patronato Pikimachay -una organización sin fines lucrativos ni políticos, cuya finalidad es situar a la cultura local de Ayacucho en el centro de un proceso de transformación social y desarrollo económico- fue, según afirmó Aníbal, un impulso fundamental en su camino de logros como emprendedor.
Con el apoyo de Añaños, quien le brindó consejos que el joven ingeniero agroindustrial considera claves para la buena marcha de su emprendimiento, Aníbal se aprestó a dar el gran salto empresarial luego de lograr ingresar al mercado local ayacuchano, a través de las bodegas y minimarkets, con sus pastas a base de cuy y de quinua blanca, roja y negra, así como de atacco.
Sin octógonos
“Lo importante de mis pastas es que, por su bien balanceada composición nutricional y aporte a la lucha contra la anemia, la desnutrición y la obesidad, no será necesario que le apliquen octógonos. Se trata de un alimento que también será muy aceptado por las familias por su buen sabor y versatilidad para preparar los tradicionales potajes a base de pastas, sin el riesgo de engordar”, destacó Prado Condori.