El estado deplorable en que se encontraban el comedor popular y el local comunal del asentamiento humano Clementina Peralta de Acuña, del sector de Wichanzao, llevó a los estudiantes de la Facultad de Arquitectura a diseñar y ejecutar el proyecto de remodelación de ambos espacios.
Los trabajos de mejoramiento de dichos espacios comunales fueron realizados por 45 estudiantes del séptimo ciclo de la Facultad mencionada, labor desarrollada en el marco de la experiencia curricular de Gestión y tecnología constructiva 5.
El área trabajada del comedor popular fue de 54 m2, la cual presentaba desniveles apreciables en la rasante de la calle, sobre una pendiente pronunciada de forma horizontal en toda su superficie, haciendo más difícil su remodelación.
La habilitación del comedor comunal implicó la colocación de 5 paneles ecológicos de caña brava, con marcos de madera y mallas de alambre galvanizado, decorado con botellas de plástico, algunas de ellas con plantas ornamentales, permitiendo una iluminación natural del espacio. Se procedió, también, a la provisión de mobiliario nuevo, elaborado con material reciclable (mesas y bancas); también se construyó un horno artesanal con barro y adobe.
“El local comunal se encontraba en condiciones precarias, sus paredes, de ladrillo artesanal crudo, presentaban rajaduras, siendo evidente el peligro de colapso de la construcción; esto motivó a los estudiantes a trabajar para mejorar este espacio”, señaló la decana de la Facultad de Arquitectura, Adeli Zavaleta Pita.
Los estudiantes de arquitectura reforzaron la estructura ya existente del local comunal colocando en los muros mallas de fierro; construyeron 13 columnas de concreto con las especificaciones técnicas debidas; llenaron y fratasaron el piso; para, finalmente, tarrajear y pintar las paredes, adornándolas con algunos diseños.