La Red de Salud Julcán formó su brigada especializada compuesta por médicos, técnicos, enfermeras, nutricionistas y obstetras, denominada “Brigada de Salud 411”, para hacerle frente al coronavirus en esa provincia de la sierra liberteña.
Esta brigada viene recorriendo todos los espacios posibles de riesgo para cortar la cadena de contagio del COVID-19 en esta provincia, para lo cual se realiza una intervención casa por casa, además de las campañas de atención medico comunitaria.
En ese sentido, el director de la red de salud provincial, Guanilo Che, refirió que esta brigada de profesionales y técnicos se encargan de medir a los habitantes su temperatura corporal, así como dar tratamiento con ivermectina, bajo prescripción médica, y medir la saturación de oxígeno a través de los oxímetros de pulso, de acuerdo a la nueva estrategia que ha puesto en práctica el Gobierno Regional La Libertad, a través de su sector Salud.
De igual forma, en las visitas, los servidores de salud también se abocan a sensibilizar a la población a tomar en cuenta las medidas preventivas para evitar el virus, al igual que recomendaciones de limpieza correcta de viviendas y pertenencias.
Para frenar la expansión del coronavirus y en medio del aislamiento social obligatorio, la Red de Salud de Julcán también recordó que el coronavirus se transmite a través de objetos contaminados y en contacto directo de persona a persona, por lo que es importante tener buenos hábitos de higiene, limpiar y desinfectar correctamente la casa, sobre todo aquellas zonas olvidadas dentro del hogar, inclusive hasta las suelas de los zapatos.
Vacunación
La Red de Salud de Julcán, entendiendo la importancia de la aplicación de las vacunas para la prevención de muchas enfermedades respiratorias e infecciosas, continúa vacunando a todos los pobladores contra la influenza y el neumococo, sobre todo protegiendo a nuestros adultos mayores.
Para ello también se han instalado puntos de vacunación en alianza estratégica con Pensión 65, tanto frente al Banco de la Nación como en plazas, mercados y en los establecimientos de salud de los demás distritos, buscando proteger a toda la población de la influenza y el neumococo, en especial a los adultos mayores y enfermos crónicos, considerando las bajas temperaturas.