Por tratarse de un corpus musical que representa una gran contribución y un punto de quiebre en el desarrollo de la cultura criolla, el Ministerio de Cultura declaró Patrimonio Cultural de la Nación la Obra musical de Felipe Pinglo Alva.
Pinglo, nacido en los Barrios Altos de Lima en 1899, es autor de al menos doscientas canciones, algunas de ellas estandartes de la música criolla peruana como «El plebeyo».
En las letras de sus canciones expresó vivencias cotidianas, valores y la situación social y económica de los barrios populares de Lima, lo que le hizo acreedor de apodos como «el bardo inmortal», «el maestro», «el cantor de los humildes» o «Felipe de los pobres».
Felipe Pinglo Alva, falleció el 13 de mayo de 1936 en su casa, rodeado de su familia y amigos. Dejó una producción musical, cuya magnitud abarcaría la composición de 300 canciones; entre ellas, más de 100 son valses, lo que permite afirmar que éste género es el mejor representado en el corpus de la obra musical del artista.
La producción de este destacado compositor y guitarrista se caracteriza por las temáticas que abordó en sus canciones y el tratamiento literario que le dio a las mismas, aportando al cancionero criollo, textos de gran calidad poética en los que plasmó las vivencias cotidianas, los valores y la situación socio-económica de los limeños de inicios del siglo XX.
Temas emblemáticos como El canillita, La oración del labriego, Pobre obrerita, Mendicidad, El Plebeyo y Jacobo el leñador, son una muestra de este fundamental aporte.