Latinoamérica debe capitalizar su rol como potencia agroalimentaria, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Para el 2050, las actividades productivas se deben elevar en un 66% para lograr satisfacer a la población mundial. Ante esta realidad, los futuros profesionales de nuestro país ya son conscientes de la gran oportunidad de desarrollo económico que esto representa.
Jackeline León, coordinadora de Ingeniería Agroindustrial de UPN, afirma que la biodiversidad y los tratados de libre comercio facilitarán nuestro protagonismo en la alimentación de las futuras generaciones. Sin embargo, se debe incentivar la investigación y el trabajo mancomunado para lograr formalizar los pisos ecológicos productivos y lograr aprovechar e industrializar de manera responsable nuestros recursos.
Asimismo, la especialista es consciente que debemos alinear nFAOuestra producción con las demandas del planeta: comida saludable, orgánica y ligera. Antiguamente nos preocupábamos solo por cubrir calorías, ahora se requiere calidad composicional. Es por ello que incentiva al desarrollo tecnológico, el cual permitirá conocer las verdaderas propiedades composicionales y fisiológicas de nuestras materias primas agroindustriales.
Los profesionales deben ser FAOy promover iniciativas sustentadas. El campo de aplicación de la agroindustria permite desarrollar la creatividad en propuestas de nuevos productos y nuevas tecnologías.
La carrera de Ingeniería Agroindustrial en UPN está preparando a sus estudiantes para afrontar los retos del futuro, adaptarse al cambio y generar soluciones confiables para el desarrollo económico y sostenible del país.