Uno de los hombres más populares del planeta y aún así, son pocas las fotografías de él que se pueden encontrar en el web. Creador del universo de “Dragon Ball”, es el principal título del boom de la animación japonesa en el mundo. Es Akira Toriyama, considerado el segundo mangaka más influyente en la historia, solo superado por Osamu Tezuka, “el dios del manga”.

Toriyama nació en la década del 50 y se caracteriza por ser un hombre muy reservado que protege su privacidad. Desde pequeño tuvo predilección por el dibujo, y disfrutaba del manga y del anime. Fue la película animada de “101 dálmatas” de Disney la que despertó al mangaka que hoy conocemos.
Su pasión por el dibujo lo hizo entrar a una escuela de diseño y aunque sus padres no estaban de acuerdo, tras graduarse comenzó a trabajar y no siguió cursos universitarios. Tenía la confianza de conseguir el éxito en seguida. Entró a un estudio de diseño, una gran empresa, sin embargo, no encajó en el lugar debido a la formalidad por lo que dejó el trabajo. Ya sin un empleo, participó en un concurso de manga y … perdió. Sin embargo, no se rindió y envió otro y otro y otro manga.
Hacía la década del 70 empezó a trabajar en Weekly Shonen Jump de Shueisha iniciando formalmente su vida como mangaka. Toriyama ha dejado grabado su nombre en la historia de la cultura pop nipona con “Dragon Ball”, cuyo manga el próximo año cumple 30 años de existencia, y ha vendido más de 230 millones de ejemplares en el mundo.
Unas obras también conocidas…
Destaca su gusto por los One Shot, y es donde podemos encontrar títulos como “Tomato, Girl Detective” (1979), “ Pola and Roid”, “Escape”, “Pink” (1981), entre otros. Aunque sin duda, “Dr. Slump” entre 1980 y 1984, es su obra más prominente antes de Gokú y los Saiyajin. De hecho, el manga ha vendido más de 35 millones de copias solo en Japón y recibió el premio a Manga Shonen y Shouji de Shogakukan en 1981. El manga nos trae a uno de los personajes más queridos del manga, “Arale”, en una divertida historia llena de aventuras.
A partir de 1984 hasta 1995, Toriyama se dedicó a “Dragon Ball”, (antes salió Dragon Boy), aunque ello no significó que dejara de publicar One Shot, entre los que destaca “Mr. Ho” (1986), “Go! Go! Ackman” (1993). Empero, ninguno de esos títulos pudo superar vivir a la sombra de “Dragon Ball”
Después de Dragon Ball
Si bien Toei Animation intentó hasta el cansancio persuadir a Toriyama para que continúe con Dragon Ball, el mangaka no aceptó continuar con la historia de Gokú. Sin embargo, tuvo participación en el diseño básico de los personajes de Dragon Ball GT, que no colmó las expectativas de los fanáticos de la saga.
Fiel a su estilo, Toriyama ha continuado con los trabajos cortos: “Cowa!” (1997), “Kajika” (1998),
“Neko Majin” (1999), “Sand Land” (2000), entre otros, los cuales han tenido un mediano éxito si se compara con Dragon Ball. No obstante, destacan las colaboraciones con otros mangaka: “Cross Epoch” con Eiichiro Oda (One Piece) y “Sachie-chan Good!!” con Masakatsu Katsura.
El “papá de Gokú” también se ha dedicado al diseño de personajes en videojuegos y su vida nunca ha estado completamente alejada del saiyajin más poderoso del universo. De hecho, “Dragon Ball Z: Kami to Kami” (Batalla de los dioses), tiene como plus, la participación activa de Toriyama en su elaboración (que por los comentarios es más cercana al estilo del manga que del anime).
Recientemente, Toriyama ha confesado que desconoce el motivo del éxito de Dragon Ball. En la entrevista a Asahi Shinbun, afirmó que “lo único que quería era dibujar para traer felicidad a los niños japoneses”. Su objetivo es “entretener” y quizá sea por eso, sin aspirar a transmisión de mensajes específicos, que Dragon Ball tuvo la recepción que tuvo.